Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

17.7.09

Fotografía y verdad o La muerte en vilo




Acabo de oír de refilón una sorprendente noticia que, pasados dos segundos, deja de sorprenderme: la famosísima fotografía de Robert Capa Muerte de un miliciano en Cerro Muriano, en el frente de Córdoba, es un montaje. Ignoro, en este momento, el alcance de la noticia, pero lo que no ignoro es que verdades dispersas no conforman una verdad única. Tiempo atrás se supo que la famosa instantánea de Robert Doisneau (Le baiser de l'Hôtel de Ville, 1950) era un posado ejecutado a la perfección por dos figurantes. En este caso, el engaño ético es insignificante. Sólo si pedimos a la fotografía que dé fe de la realidad, tendríamos motivos para sentirnos burlados. Pero la fotografía no sólo retrata la realidad; también la crea. O la niega, como en esa foto de Stalin y Yezhov, en la que el jefe de la policía secreta (NKVD) se ha evaporado. (Parafraseando a un aguerrido político de la Transición, se podría suponer que quien se mueve desaparece de la foto. El mismo Trotski fue uno de los más notorios desaparecidos. Sucedía esto en los tiempos en que una imagen valía más que mil palabras. Lo que sucede, por otra parte, en estos tiempos que corren, es que una imagen engaña más que mil mentiras.) Lo cierto es que si esa fotografía de Capa es mentira, lo es por lo que aparentemente representa y no por lo que en realidad es. Pero si hay mentira en ella, esa mentira es verdad. Y esa verdad tiene mucho que decir. En con secuencia, la ética estética se resiente, qué duda cabe, y nos enfrenta con el viejo asunto del fin y los medios... Pero está visto que somos de barro...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario.
Contestaré si tengo algo pertinente que añadir.